El jazz en GDL tiene mucho futuro

La Je t’aime Guadalajara Big Band tuvo un debut de ensueño en el Degollado, al ser dirigidos y tocar junto a Joan Chamorro y Gerry López. Foto: José Armando García

Bajo la dirección de Joan Chamorro, la Je t’aime Guadalajara Big Band inunda de música el Teatro Degollado

Por José Armando García 

Durante el encore de la presentación en sociedad de la Je t’aime Guadalajara Big Band, la noche del 18 de enero, los espectadores que llenaron la zona baja del Teatro Degollado constataron una cosa: talento hay y de sobra.

Dirigidos por el maestro catalán Joan Chamorro, los 21 integrantes de esta banda formada por niños y jóvenes de entre los 9 y 21 años, en julio de 2019 y que desde esa fecha han estado trabajando con Klaus Mayer, demostraron de qué están hechos y sacaron las mejores notas de sus instrumentos.

“Me emocioné cuando los vi (a los chicos) y ahora el resultado, muy bien, la verdad no me lo esperaba, porque son gente joven que ha estado trabajando muy bien con el profesor Klaus y realmente el sonido, bueno lo habéis oído vosotros, sonaba bien, realmente muy bien, los cantantes muy buen feeling, en general, felicidades, muy buen trabajo el que han hecho”, expresó Chamorro, al término de la presentación, durante el cóctel de celebración.

Producido y promovido por Rocío Soleil y Gerry López, este concierto formó parte de la gira que Chamorro, director y fundador de la Sant Andreu Jazz Band, realiza por México para promover el Método Chamorro de educación musical, y que en Guadalajara incluyó un workshop el viernes 17 de enero.

“Estoy contento, la gente preguntó un montón, tres horas sin parar de preguntar, de comentar cosas que supongo que son importantes en la pedagogía, sobre todo cuando trabajas con niños, luego también aplicable a los mayores, pero cuando vas con niños hay que ser muy cuidadoso, y bueno, por eso estoy aquí, trabajo con niños y tengo mis resultados”, dijo Chamorro.

Antes del encore, la big band ofreció un recital en el que interpretaron piezas como “Aguas de Março”, y “Unchain my Heart” entre otras.

Chamorro, todo ritmo al momento de dirigir a los jóvenes, los invitaba a animarse durante sus respectivos solos y al terminar cada uno de ellos el director se los reconocía con un apretón de manos o una palmada.

Como invitados estuvieron López, quien interpretó con la banda algunos solos de saxofón alto, además de dirigir algunas piezas, y Klaus Mayer, quien dirigió a la orquesta cuando Chamorro interpretó una pieza con el saxo barítono.

Entre los músicos destacó la presencia de André Cisneros, un niño de tan sólo nueve años, quien con aplomo tuvo dos solos de trompeta, mismos que arrancaron las ovaciones de los asistentes.

Al finalizar el concierto, los asistentes tuvieron oportunidad de conocer y charlar con los integrantes de la big band, a quienes felicitaron por sus ejecuciones musicales.

Guadalajara puede estar tranquila. Hay una orquesta que la ama y que le garantizará buen jazz para el futuro. El Teatro Degollado así lo atestiguó.